Casi todos nosotros pasamos horas y horas en
nuestras oficinas o negocio.
Incluso más que en nuestros propios hogares y por ello debemos procurar las
mejores opciones para sentirnos completamente a gusto en ese lugar, y para ello
no es mala idea comenzar con la propia disposición
de los elementos en nuestro espacio y desde luego, de los colores del mismo.
Seguramente te has sentido más cómodo en algunos sitios
que en otros cuyo aspecto no te pareció demasiado amistoso. Pues todo esto pesa
a la hora de ordenar una oficina o negocio, e incluso a nosotros mismos nos
puede pasar de encontrarnos trabajando frente a una ventana que da a un
estacionamiento y nos sentimos completamente desganados como si fuésemos seres
inanimados. En cambio si colocamos una
bella jardinera con flores nuestra vista se desvía para regalarnos una
sonrisa al verla.
Todo depende del trabajo que desarrolles. Por ejemplo, a
quienes ocupan sitios de poder
les conviene colocar el escritorio de frente a la puerta y detrás de sí colocar
diplomas o libros, que nos dan la idea
de respaldo, que suele representarse con la tortuga.
En el caso de tener una ventana con una hermosa vista,
lógicamente no debemos desperdiciarla y el escritorio debería ir frente a ella,
pero procurando colocar al menos un espejo
frente a la puerta, para así poder observarla sobre todo si alguien
ingresa mientras trabajamos.
En el caso de tener una ventana y que nuestra función no
sea de poder, sino que sea una tarea de la que requerimos de la presencia de
una musa inspiradora, como puede ser un
escritor o un diseñador, etc., y tenemos una ventana enfrentada a la
puerta, lo ideal es que estemos de espaldas a la misma, con la vista despejada
hacia la ventana.
Si por esas casualidades la vista no es del todo
agradable, lo podemos solucionar fácilmente colocando una jardinera como ya lo
mencionamos, o quizás un comedor de
aves, pero en definitiva algo que le de vida a tu visión mientras
trabajas y verán como aparecerán todas las musas griegas ante ti para inspirarte
y facilitarte la tarea.
Por supuesto, no debemos olvidar el espejo frente a
nosotros para poder ver la puerta y de no ser posible no te agobies, pues
puedes conseguir algunos objetos
colgantes que contengan campanas para avisarte si alguien entra.
Para aquellos que se dediquen a tareas como un escritor,
necesita indudablemente un ambiente que lo ayude a alinearse con sus propias
emociones, es decir con la introspección en sí mismo. Si es tu caso el color ideal sería el azul. No
descartes la opción de los tonos de
verdes ya que ayudan a crear nuevas ideas permanentemente y por ello son
ideales para los creativos, diseñadores, etc. Por este motivo es que también
puede ser empleado por los escritores.
Un color que siempre se utiliza es el blanco, un color completamente
aconsejable para aquellos que desarrollen tareas intelectuales y que al mismo
tiempo requieran objetividad. Es un color neutral diríamos y muy empleado en laboratorios, arquitectos, dibujantes,
entre otros ya que da una sensación de notorio orden y sobre todo de limpieza.
Pero hay un color que es ideal para casi todos los seres
humanos, el amarillo. Este color
es formidable ya que ayuda a devolvernos las ganas de trabajar. Para ser más
claros, muchas veces tenemos un trabajo rutinario que nos quita las ganas de hacerlo.
Por ello el color amarillo es lo
que necesitamos, pues aumenta la
energía de lugar y con ella la nuestra propia.
A grandes rasgos, estos son los trucos que debes tener en cuenta a la hora de acomodar tu oficina o simplemente de ocuparla
siguiendo la tradición china del Feng
Shui.
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