La mejor manera de seguir con nuestras vidas y atraer más
bendiciones es dejar ir aquello que no nos sirve y que nos estanca. Este es un
ritual efectivo de perdón hacia otros o hacia nosotros mismos.
Reserva unos 10 minutos de calma y tranquilidad; siéntate
cómodamente, regula tu respiración y entra en concentración. Visualiza aquello
que quieres soltar. Velo con detalle, siéntelo y vívelo intensamente. Visualiza
la situación o persona en frente tuyo y siente una luz rosada intensa crearse
en tu pecho, y una luz morada intensa en el medio de tu frente.
Proyecta estas dos luces hacia la situación o persona en
frente tuyo (como un cordón que va de tu cuerpo hacia ellos) y ve cómo se
empieza a crear un globo gigante alrededor de esa situación. Observa con
detalle el globo de luces rosada y morada encerrando la situación o persona. Es
un globo fuerte. Pruébalo: usa una aguja gigante y trate de explotar el globo
sin ningún resultado.
Dedique unos cuantos minutos a visualizar la situación
rodeada de luces rosadas y moradas y envuelta en el globo poderoso. Agradece
todo lo que ha aprendido y bendice la experiencia, aunque haya sido dolorosa.
Cuando te sientas preparado, ve cómo el globo empieza a
elevarse, flotando en el aire hacia el cielo. Ve cómo el cordón de luces desde
tu cuerpo no lo deja elevarse más allá de un cierto punto. Ahora visualiza unas
tijeras gigantes rodeadas de luz blanca y corta el cordón que lo une al globo.
Ve el globo elevarse más hasta hacerse un punto casi invisible y perderse para
siempre en el cielo.
Siente la tranquilidad de que no tendrás que molestarse más
con esta situación pues tu reacción emocional hacia ésta se ha ido para siempre
de tu vida.
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